“Todo a pulmón”: Becha Ñúñez sueña con subir a Argentina al podio mundial

La capitana santomeña abrió su corazón tras el subcampeonato en la Conmebol Copa América y contó cómo se forjó el camino a fuerza de sacrificio, pasión y resiliencia.

FUTSAL

4/11/20253 min read

La selección argentina femenina de futsal logró el subcampeonato en la Conmebol Copa América disputada recientemente en Brasil, lo que le permitió sellar su clasificación al primer Mundial de la disciplina que se disputará en noviembre próximo en Filipinas. En el corazón de ese logro está Carina “Becha” Núñez, la capitana santotomeña que no solo lidera en la cancha, sino que también representa la lucha diaria de tantas jugadoras albicelestes.

Entrevistada por el colega, Rubén Sotelo, en el programa Punto x Punto de Radionord (FM 97.3 Mhz), Becha contó: “Cuando supimos que iba a salir el primer mundial, nos propusimos el primer objetivo de clasificar, porque creo que nos lo merecíamos”, expresó, aún con la emoción a flor de piel. Y no es para menos: Argentina llegó a la final por tercera vez consecutiva, consolidando un ciclo de crecimiento que busca ahora dar el gran salto.

El sueño que parecía lejano

Hace apenas un año, Becha estuvo a punto de bajarse de la selección. El desgaste era fuerte, el reconocimiento escaso y la igualdad con el fútbol masculino, una lucha interminable. “Esa entrevista que hice en la cancha fue la gota que rebasó el vaso”, confiesa. “Ya me sentía muy agotada física y mentalmente… Pero después me dije, que loco ¿no? Porque no pensaba que se podía jugar un mundial y de repente, al año siguiente, dicen que tenemos un mundial”.

Y ese anuncio fue una señal. “Sentí que todavía me tocaba conquistar cosas. Tengo la convicción que algún día Argentina va a estar en el podio y espero que sea con la medalla de oro”.

La clasificación

La semifinal contra Paraguay que daba la clasificación al mundial fue más que un partido. “Emocionalmente fue como haber ganado una final para nosotras. “Cuando nos metieron el gol jamás nos pusimos nerviosas; al contrario, nos fortaleció”.

La final con Brasil dejó sabor amargo, pero no frustración. La diferencia estructural entre ambos equipos es evidente. “Las jugadoras de ellos toda su vida se dedicaron al futsal. En Argentina no es así. Yo juego al futsal y trabajo. En Argentina no se cobra por jugar esta disciplina, y otras simplemente estudian, y el tiempo que les queda se dedican a jugar. Todo lo hacemos a pulmón”.

El sacrificio detrás del escudo

Becha no esquiva las verdades incómodas. “En mi caso gano un sueldo mínimo y tengo que pensar qué voy a hacer cuando ya no pueda jugar. Muchas veces no te pagan en blanco, aunque tengas contrato. El fútbol no es prioridad, aunque a la gente le cueste creerlo”.

Aun así, se siente orgullosa de representar al país. “Cuando nos ponemos la ropa de la selección es como si fuera la primera vez. Y si sacás una publicación preguntando quién quiere ser parte, van a haber millones. No les va a importar cuánto les paguen”.

De Santo Tomé al mundo

Su historia empezó en los Juegos Evita, a los 16 años. Luego vino la sub 17 de fútbol campo, San Lorenzo, donde conoció esta disciplina de la que se enamoró perdidamente. Ya jugando futsal, siguió su carrera en Brasil y de ahí pasó al Viejo Mundo. “Me fui a España porque iba a ganar en Euros, pero cuando iba al supermercado gastaba casi todo y me planteé trabajar. Hoy gracias a Dios tengo un trabajo en Madrid y puedo hacer las dos cosas: jugar y trabajar”.

Ahora, el objetivo es claro. “Ya clasificamos, ahora queremos subir al podio. Queremos llevar la bandera lo más alto posible”.

Con esa convicción, Carina Becha Núñez sigue marcando el camino. Desde el esfuerzo, el amor por la camiseta y el ejemplo. Y, por qué no, soñando con ese podio en Filipinas, donde la historia apenas comienza.

Por Rubén Poletti
Especial para Sports Corrientes